Sobreviviendo al COVID19: Segunda parte

 


Juan Francisco Lomelí Rafael
Profesor normalista
Lic. en Pedagogía y maestrías en ISIDM y UNIVES

Director de USAER

Escucha o lee abajo. 

SEGUNDA PARTE






Hola:

Te comparto esta segunda parte de mi relato, si no has escuchado la primera parte, puedes dar clic en esta liga👈, saludos.

Día 12: Recurro por los resultados que me hice del tórax. Entre lo que puedo entender es que "Hay placas de ateroma calcificada adosadas a las paredes vasculares". Leo otros conceptos como atelectasias, una imagen ovoidea hiperdensa de 9 mm, una imagen puntiforme hiperdensa en hígado, una figura ovoidea hipodensa de 9 mm en pared delgada en el lóbulo superior derecho (del pulmón), etc. 

En la conclusión, lo que más me llama la atención son los  "hallazgos que sugieren secuelas fibróticas de infección COVID" Por consiguiente, luego me explica la doctora al leer y mirar la tomografía, que en otra ocasión tuve COVID19, cuyo daño se puede apreciar por esas "placas de ateroma calcificadas..."

Por lo tanto es la segunda vez que este bicho ataca mi cuerpo y la primera vez no lo advertí. De hecho, rememorando mi últimos senderos👈, después de un largo caminar de 10 o 20 Km empezaba a agotarme pronto y tenía que detener, cosa que no me había pasado. Pero lo atribuí a que duré mucho sin hacer estos recorridos largos. Ese fue el aviso, pero no le di la interpretación correcta.

Y bien, dado que efectivamente tengo Neumonía, habrá que desprender esos sedimentos que me limitan la respiración, así que la doctora me vuelve a suministrar inyecciones, seguir con nebulizaciones y empezar con ejercicios respiratorios. 

Considero que el virus ya terminó su ciclo vital en mi organismo y cumplió su misión. Ahora la mía será salir de estas secuelas, dado que me cuesta trabajo respirar, mi pulsación diastólica está en los 60 y 55 pulsaciones por minuto, mi hablar es pausado, como si estuviera cansado, me cansa caminar unos metros, sudoración excesiva. 

Sin embargo lo favorable es que tengo buena oxigenación, con apetito y mi mente está activa, el cansancio no es mental y aquí sigo ocupándome de lo que me gusta.

La cercanía con mi familia es vital, tanto de los que viven conmigo, como los distantes (hermanos, sobrinos, primos...). Las palabras de aliento de amistades, compañeras y compañeros de labores es reconfortante y eso alimenta mi espíritu. Aun tengo cosas que hacer en esta vida y me recuperaré.

Día 13: Mismos síntomas, mismas sensaciones que produce el que tus pulmones no hagan lo que saben hacer, es decir, realizar ese intercambio de gases, "ingresar el oxígeno a la sangre y eliminar el dióxido de carbono", pero ya los iré convenciendo a que desechen lo que les impide su función.

Por lo tanto me ocupo de pendientes del trabajo que no son extenuantes y es necesario tenerlos para que no se acumule el trabajo, para lo cual me ha acompañado mi hija a hacer algunos recorridos a los domicilios de compañeros para recabar unas firmas e ir a llevar unos documentos a una oficina de la SEJ.

Ya empecé a revisar unos correos, a enviar mensajes a mis compañeras y compañeros y mañana empezaré a organizar lo que se tiene organizar. Repito, esto no me agota, tener la mente ocupada me ayuda y si atiendo estas demandas, continuaré atendiendo mi salud con tranquilidad, es parte de mi terapia.

Día 14: Desperté muy temprano, pero descansado, así que estoy dedicando un tiempo a recapitular la narración de estos días para evitar se me escapen detalles. Releo el diagnóstico de Neumonía, recurro a fuentes científicas para aprender más de mi enfermedad y de esa manera saber como contrarrestar los efectos que me dejó este virus nombrado como "SASARS-CoV-2" que casusa la enfermedad COVID19

Algo necesario de entender es que el virus dura en nuestro organismo hasta 14 día, la temporalidad
depende de varios factores que aún están en estudios y básicamente es de la reacción de cada organismo.
En lo particular considero, decía arriba, que ya no lo tengo. Ya percibo olores, al igual que el gusto.
La fatiga por fortuna desapareció y ahora lo que me queda es atacar los efectos que dejó.
De cualquier manera debo recurrir a realizarme otro estudio para descartar que aún lo tenga.
Día 15: Sigo con el tratamiento, mi problema sigue siendo parámetro de 58 a 68 de presión diastólica,
con baja pulsación, de 50 a 70 p/m. Mi voz sigue siendo de tono bajo y con cierta dificultad, como cuando
anda uno sofocado. Empiezo a tener acides estomacal, producto de una pastilla y jarabe que tomo a diario, lo cual
trato de contrarrestar comiendo manzana o en ocasiones una media cucharita de carbonato.
Encontré una publicación reciente publicado por la UdeG, de la Lic. de Terapia Física y las descargué
para leerla. Es un manual muy práctico sobre rehabilitación para pacientes post COVID-19👈, con relación
a ejercicios respiratorios y de relajación.
Día 16: Misma sintomatología. Me sigo dedicando a mi faena laboral que la puedo hacer equipo de cómputo
y de comunicación vía WhatsApp o correo electrónico. Ha habido comprensión al respecto por
parte de mis autoridades superiores y la solidaridad de compañeras y compañeros de trabajo, además
de lo reconfortante que es el recibir mensajes de familiares y amigo, eso alimenta mi espíritu y hace
que las cosas las veamos con mejor cara. Es encontrarle lo positivo a la situación y tomarlos así,.
como una oportunidad de aprendizaje que puedo compartir con los demás.
Dia 17: Voy de nuevo con la doctora a revisión. Mi presión diastólica ya llegó a 80, muy buena noticia.
Al auscultar mis pulmones menciona que van evolucionando bien. Seguiremos con el resto de inyecciones,
nebulizaciones y ejercicios respiratorios, además, me receta una vitamina y un antiácido.
Eso es bueno, pues mi estómago ya empezaba a batallar con el medicamento.
Hasta aquí esta segunda parte, en que se observa que, aunque lento, me estoy recuperando. Menciona la  doctora que para que salgan esos sedimentos se necesita tiempo, quizás un mes más, mientras tanto me dedicaré a realizar los ejercicios de manera sistemática, estableciendo una rutina. 
Estaré bien.
Un saludo a quienes me escuchan o leen, les deseo éxito en sus ocupaciones, en las relaciones que estrechas que establezcan con su familia, con sus amistades. Mantengamos una actitud positiva, evitemos ambientes o personas tóxicas, eso no te permite crecer o lidiar con lo que tendrás que lidiar si te llega este virus del COVID-19 o cualquier otra enfermedad. Recuerda, cuerpo sano en mente sana, esa es la solución, empezando con una alimentación equilibrada, erradicar alimentos nocivos y hacer ejercicios, tanto físicos como de relajación.
¡Que sigas bien!


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Comentarios

  1. Gracias a Dios ya estás mejorando primo!! Ánimo!! Saludos de la familia 👪

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  2. Que bueno que su recuperación sea buena, ánimo y adelante le mandamos un cariñoso abrazo, saludos

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